
Este profesional debe estar capacitado para hacer gran variedad de tareas gracias a su amplio conocimiento teórico y práctico. Entre sus funciones principales se encuentran la de revisar y examinar así como identificar los problemas derivados de fallos eléctricos en instalaciones eléctricas o mecánicas ligadas a la industria y a la producción. Por tanto, el electricista industrial debe mostrar competencias en campos tan variados como la física, la química, las matemáticas, la tecnología, la electromecánica, informática, etc. De este modo, el electricista industrial ve cada vez más ampliado el campo de aplicación de su profesión, ya sea como encargado de diseño y mantenimiento de sistemas eléctricos industriales o en el desarrollo de nuevos proyectos de investigación.