Con la llegada del invierno y el descenso de las temperaturas, es común que notemos un ascenso directamente proporcional en la factura de la luz. Son muchos los aparatos eléctricos conectados a la red en estas fechas, desde calefactores, estufas y mantas eléctricas para combatir el frío hasta la misma luz, que es encendida mucho antes al anochecer más temprano.
Si no queremos llevarnos sorpresas con las facturas, es conveniente que tomemos una serie de medidas, ya sea contratar una tarifa plana y pagar un precio fijo durante todo el año o tener en cuenta una serie de trucos muy empleados en montajes eléctricos en Sevilla. Por ejemplo, el empleo de bombillas de bajo consumo implica una vida útil más duradera y un consumo menor, por lo que el ahorro es enorme. Si subimos algún grado el termostato del frigorífico durante el invierno, también estaremos ahorrando. Empleando programadores de calefacción para las horas más críticas, como el amanecer o las horas previas a acostarnos, controlaremos el abuso de electricidad. Sumando todo esto, notaremos un descenso en la factura bastante considerable.
